Una adicción es un patrón de comportamiento al que una persona se encuentra afectada, el consumo de sustancias (conductas adictivas – juego, apuestas, compras, trabajo, sexo, otros) es la parte más observable. Detrás de éstas, existen una serie de elementos que hacen que este patrón sea difícil de resolver.
Primero, pensar en la posibilidad de que alguíen cercano esté padeciendo de ello es, en si mismo, un signo del patrón; es altamente probable que nos encontremos confundidos por pensar en esa posibilidad y estemos encontrando razones que eviten confirmar nuestras sospechas.
Por otro lado, existen una serie de caracteres que la conducta adictiva muestra a través de las consecuencias que emana en diferentes áreas del quehacer humano (familiar, laboral, educativo, social, legal, así como en el personal) que normalmente son minimizados, justificados por su propio entorno (familiar, social) así como la misma persona que lo padece, por lo doloroso que es aceptarlo.
Como toda problemática que afecta la salud, cuánto más pronto lo detectemos (aceptemos en este caso) es mejor, para su adecuada intervención. En nuestra experiencia, las consultas – como en las enfermedades crónicas – se dan cuando ya tenemos el problema bastante enraizado y al mismo tiempo minimizado (la paradoja de la adicción); esperamos que este texto llegue a personas en fases previas y podamos ayudarlo oportunamente.
Cómo reconocer una adicción
La lista puede ser interminable, queremos resumirlos en los más importantes y tomarlos en cuenta, como cuando una persona hace fiebre alta ( mayor a 38.5) frecuentemente, algo importante está ocurriendo.
- Apatía – Anhedonia – Abulia, la persona muestra una falta de interés por todo aquello que no sea otra cosa que conseguir lo necesario para el consumo; lo que parecía motivarle antes (trabajo, relaciones, actividades) pasan a ser secundarias.
- Cambio en los hábitos de cuidado personal. Abandono y/o desatención de rutinas saludables; alteraciones en el ciclo del sueño, alimentación y/o realización de ejercicios físicos.
- Problemas económicos: Aumento de las necesidades económicasdebido al gasto que supone el hábito adictivo.
- Cambios de humor e irritabilidad: que puede mostrarse desde un decaimiento o apatía poco habitual en la persona o con un ánimo más caracterizado por la euforia.
- Alteración en las relaciones sociales: Puede mostrar una tendencia al aislamiento, cambio de amistades, abandono de vinculaciones afectivas anteriores, desapego de la familia, en ocasiones la persona muestra un aumento de la agresividad o la irascibilidad en la forma en que se comunica.
- Incumplimiento de responsabilidades: Desvinculación de aspectos que anteriormente suponían una responsabilidad para la persona, le es indiferente todo.